Resulta curioso cómo una mujer pensionista que vive de una renta tan precaria que apenas le da para mantenerse, tiene que ir haciéndose cargo de los hijos que vuelven al hogar, con su mujer y sus retoños porque han perdido su vivienda debido a todos los desastres de la crisis; esa que avanza a paso veloz sin que se sigan políticas que logren frenarla.
Resulta curioso -por no usar otra palabra peor- que esa mujer tenga que pagar el IVA de todos los alimentos que entran en su hogar, y demás gastos, al 21%, cuando los beneficiados - y nunca mejor dicho- de la amnistía fiscal solo pagan un 10% de IVA sobre ese dinero que antes defraudaron y ahora les es devuelto.
No soy muy inteligente, lo sabemos de sobra, pero aquí hay algo que no concuerda. Y eso que para ser exactos estoy más loca que cuerda.
Pues ale, después de todo este desastre, alguien intenta hacer las cosas bien...veremos si le dejan...
Os lo cuentan en esta entrada
Begoña, dudo mucho que Montoro sea capaz de hacer algo bién, visto el resultado de la "amnistia fiscál", que no ha cubierto ni la mitad de las previsiones que había hecho.
ResponderEliminarNo me gustaría ser mal pensado, pero la dichosa amnistía parece hecha a la medida de alguien muy próximo al poder. Es muy rentable pagar solo un 10% sobre un dinero que en su momento tendria que haber tributado por encima del 40%.
Y estaría a favor de la publicación de esa lista, si fuese integra. Pero me da la impresión también, de que si se publica estará adecuadamente "aligerada" de algunos nombres.
La solución no es airear sus nombres, es que paguen religiosamente como cualquier ciudadano.
Un abrazo.
me tiene super apenado lo que cada día sale de abajo de una baldosa en vuestro país (a la sazón el de mi esposa), ayer vi un viejito que daría sus 600 euros si alguien le acoje
ResponderEliminar.
me pregunto ¿y todo el sudor que dejó caer para engrandecer esa nación, de que manera retorna para la felicidad de sus últimos años de vida?
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nosotros hemos pasado terrible, no por ello, dejo de consternarme por lo que le sucede a alguien que no tiene ninguna diferencia con lo que soy y con los derechos que me asisten
lamento eso, mi solidaridad y ojalá haya quien rumbee este barco semihundido
Hay una solidaridad en aumento, y este es el beneficio que nos va a quedar de esta crisis y de las medidas antisociales que se están tomando. Espero que no lo olvidemos. La privatización de la sanidad y otros sectores nos llevará a una mayor desigualdad. Ahora ya sabemos que hasta los enfermos crónicos y los que padecen enfermedades graves tendrán que pagar por utilizar el servicio de ambulancias, y también se pagará un porcentaje de las prótesis, sillas de ruedas, etc.
ResponderEliminarLo curioso es que nadie habla de crear empleo, de incentivar sectores como el de las energías renovables estancadas por un decreto.
Un saludo.
Rodericus, a algunos para que paguen hay que refrescarles la memoria.
ResponderEliminarTambién pediría una lista del dinero que Hacienda debe a pequeños empresarios que tuvieron que seguir haciendo sus declaraciones cada tres meses y seguir pagando a esa Hacienda que les seguía sin pagar... Algunos al final se vieron abocados al cierre aún sin cobrar, hay casos de hasta 60.000 euros.
Cierto que un nombre en una lista no sirve de nada, que cumplan con la sociedad.
Saludos
Omar, digo yo que en algún momento todo esto tan desagradable se parará, pero cada día nos sacan infinidad de muertos por todos lados.
ResponderEliminarLo que son los recortes nos dejan cada vez más patitiesos, se están cargando derechos a un ritmo descomunal.
Saludos
Pilar, me parece deningrante que quienes asisten a diálisis o a dar quimioterapia, por ejemplo tengan que pagar 5 euros por su desplazamiento en ambulancia. Aquí se discrimina a los enfermos y me parece de locos. Si la sociedad en general ya está presionada, los más débiles se llevan la parte peor.
ResponderEliminarQuizá debería pagarse en cambio por viajar en un coche oficial y tener ciertos privilegios políticos que no tenemos el resto. Creo que ahí cabría más a recortar.
El empleo se destruye a pasos agigantados porque la empresa grande absorbe a la pequeña y la pequeña quiebra. Algo debería cambiarse ya, porque lo destruido no se recupera.
Pilar, es cierto, somos más solidarios pero las carencias crecen a un ritmo tan grande que aunque queramos no podemos ayudar ni la cuarta parte de lo que deseamos. La solidaridad debería llegar desde quienes recortan en casos que no se deberían tocar; y el país estaría de otra forma, pero claro sería como pedir un milagro.
Si al final nos sirviese para salir adelante sin pedir rescate, al menos, pero todo está por ver. Esperemos.
De momento da la sensación de que le quitan al que menos tiene y al que más lo necesita. Me parece incongruente.
Saludos