Un blog donde la tristeza y el buen humor caminan de la mano.
Donde los límites entre fantasía y realidad se entremezclan hasta conformar un solo presente.
Pilar, es inevitable pensar en quienes no están y desear que estén aquí; pero siempre lo estarán a través de todo lo que nos dieron. Ello no debe oscurecer disfrutar de todas esas personas que aún tenemos en carne y hueso, creo que en estos días debemos sentirnos muy felices de poder compartir juntos tantos momentos. Besos
Gracias por colgar mi entrada Begoña. Tienes razón ellos están aunque no estén, lo sé muy bien, y también debemos también disfrutar de aquellos que tenemos con nosotros porque son realmente ellos los que nos ayudan a que nuestras sonrisas sigan siendo sonrisas.
Soy afortunada por tener a unos y sentir a otros ;-)
Rebeka, es bueno sentir dolor, porque eso prueba que se es capaz de sentir, pero lo importante es tener la capacidad de ser feliz sean cuales sean las circunstancias.
Estos son días en que los sentimientos se mueven... Avalanchas de recuerdos e ilusiones que hay que encauzar...
ResponderEliminarUn abrazo, Bego.
Pilar, es inevitable pensar en quienes no están y desear que estén aquí; pero siempre lo estarán a través de todo lo que nos dieron.
ResponderEliminarEllo no debe oscurecer disfrutar de todas esas personas que aún tenemos en carne y hueso, creo que en estos días debemos sentirnos muy felices de poder compartir juntos tantos momentos.
Besos
Gracias por colgar mi entrada Begoña.
ResponderEliminarTienes razón ellos están aunque no estén, lo sé muy bien, y también debemos también disfrutar de aquellos que tenemos con nosotros porque son realmente ellos los que nos ayudan a que nuestras sonrisas sigan siendo sonrisas.
Soy afortunada por tener a unos y sentir a otros ;-)
Felices Fiestas, un abrazo muy grande!
Rebeka, es bueno sentir dolor, porque eso prueba que se es capaz de sentir, pero lo importante es tener la capacidad de ser feliz sean cuales sean las circunstancias.
ResponderEliminarFelices fiestas también para ti.
Un beso