Hoy es el cumpleaños de mi mejor amiga. Ella trabaja en un despacho al que llega la gente que busca solución, cuando desde otros lugares no se la han dado. Es asistente social. No suele hablarme de su trabajo porque guarda como nadie el secreto profesional, pero se asfixia cada día por toda esa gente a la que por mucho que quiera, por temas burocráticos no puede ayudar. Una vez, cansada hasta límites insospechados por esa carga emocional negativa, de desvivirse por hacer algo y no poderlo lograr, me decía: Imagínate, yo que debo darles ánimos, hacer que miren pese a todo la vida con esperanza, tuve que darme la vuelta mientras hacía una fotocopia de todo lo que me aportaron y ponerme a llorar. Yo que estoy para ayudarles es lo que puedo ofrecerles, darme la vuelta, esconder mi llanto y arreglármelas como puedo para disimular...
Hace meses le cambiaron el despacho, pasó de un edificio desgastado a un ayuntamiento lujoso, con todas las comodidades del mundo. Ahora vive en las dos caras de la realidad, la de quienes llegan en coches de gama alta, trajes caros y viven vidas de cuento. Y quienes llegan sin nada, esperando un cobijo, una mano amiga, una ayuda mínima necesaria...y como llegan se van...porque para los formularios les falta algún requisito.
Coincidimos solo dos años a tiempo real, luego ella se fue a vivir a otra comunidad, y a veces, cuando mis hijos quieren ser crueles conmigo me dicen: Es tu única amiga y eso sólo porque está muy lejos, que si no, no te quedaba ni una. Con esa frase, bastante cierta pese a todo, intentan ofenderme y sin embargo me río y les respondo que estando ella me basta y sobra, porque en verdad no necesito ninguna más. Me alegro de saber que en el mundo existe una persona como ella. Aunque solo sea una. Porque es perfecta.
Su marido se quedó al paro hace poco. Barajan la posibilidad de irse a vivir al extranjero. En mi entorno hay más gente barajando esa posibilidad en vista de todo lo visto. Y yo sé que donde quiera que viva, donde quiera que esté es y será para siempre mi mejor amiga. Es la clase de persona con la que siempre se puede contar. Y es su cumpleaños, es la única persona que me conoce en carne y hueso, que sabe de este lugar y no sé si lo sigue, una vez le di la dirección y nunca más hablamos de ello.
Hoy cumple 44 años, no pasa por un buen momento, como el resto de los conciudadanos que vivimos con honradez. Pero pase lo que pase nos mantendremos en pie y saldremos de ello. Seguiremos siendo quienes somos pese a quien pese, y seguiremos manteniendo la esperanza y la amistad porque aunque suba el IVA no nos lo pueden cobrar.
Quien diseñó la vida tuvo la lucidez de hacer las cosas de verdad importantes gratuitas =)
¡¡¡Felicidades!!!
Felicidades a tu amiga, allá donde esté. Y a ti, por este escrito arrancando de tu alma.
ResponderEliminarUn abrazo y besos a ambas.
Mián Ros
Gracias Mián Ros.
ResponderEliminarEs curioso, nosotros inventamos mundos escritos. Ella por su trabajo se ve forzada a escribir (a veces fotocopiar) la historia verdadera que NUNCA quiso escribir.
Creo que sólo los asistentes sociales saben en verdad de que forma está el país y como funciona.
Esas son las estadísticas que más deberían contar, porque no es oro todo lo que reluce.
Mi amiga se indignó cuando la trasladaron a un edificio nuevo y reluciente lleno de comodidades, quería estar en el viejo y lleno de parches por no mezclarse a diario con la crem de la crem, que después deniegan la ayuda justamente a los más necesitados.
Lo dicho, es perfecta.