Utilizo esta táctica apasionante cuando alguien no entiende algo. Porque aunque no lo parezca comprender lo que hacen los demás, o lo que dicen cuando se explican mal, o contar lo que pasó, no es tan sencillo. Si nos fijamos bien, la gente de nuestro entorno se pasa la vida en ello. Al menos yo, que me rodeo de realistas las veinticuatro horas del día. Los ilusos carecemos de ese problema, un iluso siempre andará por las nubes persiguiendo a seres imaginarios que son más interesantes porque traen consigo una historia que hay que desentrañar, eso hace que detenerte en pequeños detalles como el repentino: "¿Te fijaste?, me miró mal". Te haga aterrizar de golpe a la realidad para recapitular aquello. "Como que quien, Herminia. Me acaba de saludar con un aire de insolencia que no veas. Pues que se prepare, que no la vuelvo a saludar".
Es tirar piedras contra mi tejado, pero si hay alguien a quien se haya mirado mal es a una mujer, a los hombres no les preocupan cómo les miren. O que ni les miren, si es bueno el escaparate el hombre mirará y si le devuelven una mirada de asesinato en primer grado, lo que es a él tanto le da. "Puede ser por la blusa- pueden explicar de golpe- es que no me secó la azul, y esta roja queda fatal con esta falda". ¿Mujer cómo va a ser por eso? "Uy que no, lo que yo te diga".
Me encuentro bastantes mujeres así, capaces de entender lo más complicado de todo y no ver lo más simple. O ver tan solo una opción cuando pueda haber tantas, entonces pongo en marcha la rueda de posibilidades:
A ver, imagínate que tiene muchas tareas para hoy y va agobiada porque no le queda tiempo, entonces te saluda como de pasada para no darte cancha y no tener que dejarte con la palabra en la boca. Yo lo hago alguna vez, mejor ni hablar que dejar a la gente colgada en medio de una frase. Se saluda y ya. (No, esa no convence).
Pues imagínate que acaba de hacer un pago importante y está recapitulando como va a planificar la economía el resto del mes. Es motivo suficiente para mirar a la gente sin entusiasmo porque en realidad vas centrado en algo importante, ¿no crees? (No tampoco sirve. Dependiendo de la situación puedes ir a la definitiva. Aunque lo apasionante es darle un toque de emoción).
Pues imagínate que haya discutido con su marido y se haya levantado de mal humor. Y esté de tan mal humor que no quiera hablar con nadie. A veces pasa, ¿es que nunca te ha pasado mujer?
_ ¡Uy que si me ha pasado!, ayer mismo, y si te cuento porqué te vas a quedar helada.
Es un hecho, si te anuncian que vas a quedarte helada, te quedas frita.