Un blog donde la tristeza y el buen humor caminan de la mano. Donde los límites entre fantasía y realidad se entremezclan hasta conformar un solo presente.
lunes, 21 de junio de 2010
Palabras que curan
Para no olvidar
domingo, 20 de junio de 2010
Algo muy emocionante que sucedió ayer
sábado, 19 de junio de 2010
Sobre edición
viernes, 18 de junio de 2010
Marea de pensamientos
Me gusta retar al destino, esa es la verdad, le he retado montones de veces y me ha respondido. Le sigo retando porque es una costumbre demasiado arraigada pero le temo, le temo porque siempre me escucha. Me lo ha demostrado tantas veces que sobra enunciarlas.
La vida es lo que sucede mientras intentas hacer otra cosa, dijo un sabio, pues fue tal que así, yo escribía otra clase de texto cuando me fui llenando de palabras que desembocaron en esas veinte páginas que iba a enviar a concurso. Nunca las envié porque una editora me dijo que a las tres faltas de ortografía se descalifica un texto, y así no hay forma, lo que a mi lo que me gusta es escribir y si algún día soy lo bastante buena tendré mi propio corrector: eso pensaba mientras me sentía tan estirada de solo pensarlo como un palo de escoba, y resulta que tal vez no necesito un corrector, tal vez sólo necesite lectores capaces de se seguirme aunque me coma una tilde, aunque me coma una coma, o patine de una forma lastimosa.
Internet es un medio en el que puedes leer lo que quieras con solo hacer clic, y tiene una ventaja, con sólo un clic puedes llenarte de basura o limpiarte el alma. Tú decides.
La marcha de Multiplicado por mil, va lenta porque me sucede lo de siempre, era un escrito ajustado a veinte páginas y se me queda corto para explicar lo que quería explicar, de modo que al no tener margen de páginas, ni de tiempo de entrega voy a explayarme sin saber bien que rumbo tomar, y con un solo compromiso, zambullirme en la escritura como siempre, respondiendo a ella del modo en que llega y esperando que sea un ejercicio sobre todo de reflexión. Tal vez lo escrito en sí mismo no resulte gran cosa al final, pero el proceso de esas páginas será un aprendizaje apasionante. Y una duda interminable, y una liberación infinita y una responsabilidad y un temblor insoportable; y un modo de estar viva y demostrarlo, y un esperar a que los noticiarios no me asalten con el deseo irrefrenable de abordar una temática que seguramente se me escapa y mucho. Creo que las veinte páginas originales serán mejores que el resultado de esas otras que vayan a salir, pero no puedo saberlo ahora. Sé que cuando quise copiar la historia tal cual estaba escrita se me resistió, y el resultado de momento es este, un volver a empezar y un camino lento. Vamos, lo de siempre. Siempre creo que algo es aceptable hasta vuelvo a remirarlo y vuelvo a corregirlo, y vuelvo a comenzarlo y se me queda grande, y lo dejo reposar, y vuelvo a reescribirlo...